Parral, Chih.- Tras recibir atención médica en el hospital de la localidad, el sacerdote Lorenzo Medina fue dado de alta debido a que no presentó heridas de consideración, a diferencia de la presidenta seccional, quien tuvo que ser trasladada a un hospital de Parral de emergencia.
El obispo de la diócesis, Mauricio Urrea Carrillo, se contactó de manera personal con el sacerdote lesionado y le extendió su apoyo desde Parral.
Mientras tanto, llamó a las autoridades correspondientes a garantizar la seguridad en aquella región, ya que, según destacó, el clima de violencia provoca que cada vez sean más las personas desplazadas y afectadas.
La investigación está en curso para determinar las circunstancias en las que ocurrió el incidente y dar con los responsables.