Ciudad de México.- Cinco miembros de la Unión Tepito fueron condenados a 70 años de cárcel cada uno, gracias al trabajo de Remedios, una mujer que padeció el asesinato de su hija y su sobrino por no pagar una extorsión.
Remedios narró a TELEDIARIO que todo comenzó el 17 de enero de 2021, fecha en que su hija y su sobrino fueron levantados y ejecutados en el número 22 de Jesús Carranza.
Tras el doble crimen, Remedios primero huyó de Tepito junto con otros familiares y acusó que para las autoridades el caso era un crimen más y ella, una mujer que no iba a alzar la voz.
“Pero ver que mi hija dejó a una niña de 13 meses de edad nos impulsó para pensar ‘¿por qué voy a huir?’”, narró a TELEDIARIO.
Luego de vivir oculta en hoteles, en otras ciudades y sin poder trabajar, impulsada por su nieta regresó a Tepito y lo que sigue es como el guion de una película de acción, pero en México es la realidad de muchas víctimas: apoyada por un mando policíaco, Remedios y su familia colaboraron en la investigación aportando datos de los asesinos, lo que permitió detenerlos uno por uno.
“Nos empieza a dar características físicas, el cómo operaban estos señores; nos empieza a marcar diferentes puntos en los cuales nosotros comenzamos la tarea de operar porque eran puntos de venta de droga marcados sobre la calle Jesús Carranza. Poco a poco fuimos deteniendo a uno por uno”, narró el oficial de manera anónima.
Remedios y su familia colaboraron con las autoridades, dando información de todos los movimientos de los asesinos de su hija y su sobrino.
▶️ Una mujer enfrentó a integrantes de la Unión Tepito, buscando justicia para sus seres queridos asesinados hace tres años; así fue como lo consiguió.
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— @telediario (@telediario) August 29, 2024
Pero el agente policial detalló que no fue sencillo lograr las detenciones pues en Tepito hay halcones, gente que vigila las calles y les da información a los delincuentes, y cuando ellos iban a realizar una operación, se encontraban con puertas cerradas; mientras luchaban por entrar, los asesinos ya habían escapado por túneles y azoteas de las vecindades.
Actualmente Remedios, su hijo y su pequeña nieta están amenazados de muerte y viven escoltados por policías las 24 horas del día, el cual es el precio a pagar por enfrentar a un cártel mexicano en busca de justicia.
Con información de MSN