Estados Unidos.- El Gobierno de Estados Unidos, encabezado por Joe Biden, publicará una norma de trabajo que prohibiría a empresas como Uber tratar a sus empleados como socios o contratistas y quedaría lista esta misma semana, de acuerdo con un oficial de la administración para Reuters.
Este cambio se encontraría entre las regulaciones con mayor impacto hechas desde la oficina del Departamento de Trabajo de Estados Unidos. El tema resulta complejo en cuanto a regulaciones legales con los esquemas de trabajo y, al provenir de EUA, tiene pinta de poder sentar un antecedente para otras partes del mundo.
México lleva tiempo peleando por la regulación de sus socios y conductores
Desde hace tiempo en México se lleva a cabo una lucha por la regulación de los socios de empresas de transporte privado y repartidores. Una de las propuestas más serias fue de ‘Ni Un Repartidor Menos’ con enfoque especial en la seguridad social.
La propuesta tuvo apartados como el trato digno de las empresas a sus trabajadores, la no discriminación, así como un esquema en donde quienes trabajen más de 30 horas semanales tenga afiliación al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con cobertura en enfermedades y maternidad; riesgos de trabajo; invalidez y vida; retiro, cesantía en edad avanzada y vejez; y guarderías y prestaciones sociales.
Otro esfuerzo del IMSS fue el impulsar a conductores y repartidores a inscribirse como independientes en un registro voluntario al Régimen Obligatorio de Personas Trabajadoras Independientes por un costo menor a 40 pesos diarios. La finalidad de este esquema es que los trabajadores independientes pudieran acceder a los beneficios de la seguridad social.
A pesar de estos y múltiples esfuerzos más por tener una relación de trabajo formal entre empresas como Uber, Didi o Cabify, entre otros, y los todavía llamados socios, hasta el momento la regulación se ha quedado en mesas de trabajo e ideas sin tener documentos firmados vinculantes.
Problemas legales en la regulación de socios y empleados
La norma que se aprobará en Estados Unidos enfrentará un problema legal que ya hemos visto en otros lados del mundo: las líneas divisorias entre un trabajador formal y la “independencia” que ofrecen estas aplicaciones de transporte.
Sobre ello, Marc Freedman, Vicepresidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, mencionó que la versión preliminar de esta norma todavía tiene poca orientación sobre cómo las empresas deben trazar la línea entre empleados y contratistas.
«La dependencia económica es un concepto elusivo que en algunos casos puede terminar siendo definido por los ojos del espectador» – Marc Freedman
Además, en algunas encuestas sobre la situación laboral de los socios y conductores se ha descubierto que los trabajadores ven muy atractiva la flexibilidad de tiempos que ofrecen estas aplicaciones. Una investigación de Oxfam México encontró que los socios preferirían el esquema de socios con tal de disfrutar de su «libertad».
Otra preocupación de los trabajadores es que en caso de inscribirse en una relación tradicional de patrón-empleado, podrían ver reducidos parte de sus ingresos netos, de acuerdo con una encuesta del mismo Uber.
Ante esta situación la solución Chile resulta interesante, En este país desde 2022 se permitió a los conductores y repartidores decidir si querían ser empleados, con todos los beneficios sociales que eso implica, o bien, continuar como independientes y mantener la flexibilidad que caracteriza a este tipo de trabajos.
Sin duda, la regulación de Uber, y similares, tendrá un impacto en todo el mundo, siendo que Estados Unidos es la sede central de la compañía. Y aunque existe un consenso general de que es necesario regular a los trabajadores con todo y sus derechos, los retos de saber quiénes son considerados independientes y quiénes no es lo que se deberá resolver en los próximos meses.