Chihuahua, Chih.- Lo que para Mateo sería un trabajo más en el jardín de niños donde estudia el primer año, tomó luego un giro inesperado luego que su madre le fuera planteando cómo decorar una tradicional calaverita de papel que su maestra le encargo con motivo del Día de Muertos.
Conociendo a su niño mejor que nadie, una idea vino pronto a su mente: “para mí era importante disfrazarla sobre un personaje que fuera significativo y relevante para la sociedad …pero no lograba aterrizar la idea, hasta que me sugirieron que podría ser sobre el equipo K9 y comenzamos a investigar más sobre ellos” narra su madre Pamela.
Emocionada, platica que Mateo se entusiasmó a tal grado con la idea del perrito calavera junto al agente, que no permitió ayuda y fue él mismo quien se hizo cargo de pintarla y ponerle la placa que lleva puesta al lado derecho de su pecho.
Para entonces su idea era entregarla al grupo K9 de la Policía Municipal y no fue sino hasta que en una de las pláticas con algunas de sus amistades que su inquietud llegó a oídos del policía 3o. Ivan Martínez quien a su vez lo planteó ante el grupo a cargo del también policía 3o. Edgar Natividad Moreno y una vez “corridos los conductos” con sus superiores tomaron la decisión de visitar a Mateo hasta su vivienda y en “complicidad” con su madre saludarlo personalmente y presentarle los ejemplares caninos.
“Le comenté a Mateo y desde que le dije estaba emocionado de que llegara el momento, me preguntaba todo el día por ellos y los perritos”, agrega su mamá.
Y el momento del encuentro llegó: el viernes 10 de noviembre los grandes ojos de Mateo parecieron abrirse más en una mezcla de asombro y emoción al ver estacionarse al exterior de su vivienda en el fraccionamiento “Paseo de los Leones”, un convoy de patrullas de la Dirección de Seguridad Pública “…fueron a nuestra casa, uniformados, en sus patrullas y con los perritos, mi hijo de principio sorprendido por ver a todos, pero sonreía felizmente, no se la creía.” comenta su madre también emocionada.
Agrega: “fue más bonito de lo que imaginé, en todos momento involucraron a mi hijo, le mostraron las unidades, el sonido de la sirenas, las luces …estaba encantando y también yo estaba muy emocionada, se tomaron fotos, platicaban con él y a mi, se me hizo muy bonito detalle”.
Por su parte, el pequeño Mateo les entregó la calaverita y los agentes le correspondieron con una insignia del Grupo K9 igual a la que portan en sus uniformes, así como el compromiso de colocar su trabajo en las oficinas del grupo.
Su mamá muy contenta por el detalle de los policías municipales externó la admiración y respeto que siente por agentes y ejemplares caninos y el agradecimiento al tercero Martinez por haber sido el conducto para que su hijo los conociera y conviviera un momento con ellos. Al final, pensativa, sólo atinó a decir que le pareció un gesto muy bonito de su parte.
El trabajo de la familia fue hecho inicialmente para participar en un concurso interno del jardín de niños que, una vez terminado, Mateo lo recuperó con el objetivo fijo de entregarlo al grupo K-9. El resultado del concurso aún no se ha dado a conocer pero con su gesto noble y generoso, que honra incluso a ejemplares fallecidos que dedicaron su vida al servicio de la comunidad, Mateo llegó más lejos y eso lo hace un ganador. Gracias Mateo!