Tamaulipas.- Integrantes del colectivo “Amor por los Desaparecidos”, localizó un nuevo sitio de exterminio en un rancho abandonado a las afueras de Reynosa,Tamaulipas.
Edith González Treviño explicó que en el lugar se encontraron restos humanos, por lo que solicitaron la presencia peritos de la Fiscalía General de Justicia del Estado, quienes procesaron la zona.
El campo de exterminio se ubica en un rancho abandonado, en la carretera Ribereña, a espaldas del antiguo centro recreativo Doña Lita, muy cerca del canal Guillermo Rodhe, a las afueras de Reynosa.
Luego de caminar por una brecha enmontada, localizaron una antigua casa de un solo piso, derruida de puertas y ventanas, en el lugar que sería la puerta principal una pinta con las iniciales del Cártel del Golfo, un grupo criminal que opera en esa zona.
De acuerdo con la buscadora, todo parece indicar que se trata de una cocina “activa”, pues ellas localizaron restos humanos alcanzados por el fuego, “todavía se puede distinguir algo de tejido y piel en estas osamentas calcinadas”.
Acompañadas por elementos del Ejército Mexicano, inspeccionaron la zona que sería utilizada por criminales para acabar con la vida de sus rivales o tal vez de personas que secuestran.
”Nosotros le decimos campo de exterminio porque al final de cuentas, es un campo en el cual acaban con la vida humana, es como se les denomina, cocinas clandestinas”, señala González Treviño.
En los alrededores de la casa y de lo que alguna vez fue una cochera, encontraron en diferentes puntos, objetos quemados y restos humanos calcinados, entre los que había al menos dos cráneos. Al lugar llegaron luego que una llamada anónima les alertó que en ese punto se localizaban restos de personas, que habían sido asesinadas y sus cuerpos calcinados, encontrando incluso algunos huesos aún con restos de piel que no había alcanzado a consumirse por el fuego.
Las buscadoras también encontraron en el racho, una mochila guinda con un cargador y un arma larga, olvidada tal vez por los criminales que utilizaban el lugar para “desaparecer” a las personas. Los peritos de la Fiscalía procesaron la zona y trasladaron los restos encontrados al Semefo para llevar a cabo las pruebas pertinentes que permitan la identificación de quien o quienes fallecieron en ese lugar.