Estados Unidos.- El caso de Melody Felicano Johnson, una mujer oriunda de Arizona, parece sacada de una película de terror, sin embargo, es muy real. Entre los planes más macabros de la mujer estuvo envenenar a su esposo durante meses, para propinarle una muerte lenta y casi imperceptible.
La víctima, identificada como Roby Johnson, forma parte de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y viajaba constantemente por temas laborales. Los documentos judiciales, alegaron que la pareja vivía junto a su hijo pero estaba tramitando los papeles del divorcio.
Como no tenía suficientes evidencias para fundamentar sus sospechas, en el mes de mayo decidió instalar una cámara en su casa, la cual grabó a Melody vertiendo una “sustancia” en la cafetera, aseguran los documentos judiciales. El hombre decidió fingir que bebía del café todas las mañanas para que la mujer no sospechara.
La pareja regresó a Estados Unidos en el mes de junio y en el hotel donde fueron alojados temporalmente, Roby instaló una cámara nuevamente, y cuatro días después logró captar cómo Melody caminaba hacia su cafetera y volvía a verter algo en el depósito de agua.
Con la evidencia que tenía, el hombre presentó una denuncia formal contra la mujer el 06 de julio ante la policía de Tucson. Las autoridades tomaron el informe pero no le hicieron seguimiento porque “no podían ver claramente lo que estaba vertiendo en la cafetera”.
Con las manos en la lejía
Ante la respuesta de las autoridades, la víctima compró cámaras adicionales con apariencia de alarmas contra incendios. Las mismas fueron colocadas en el cuarto de lavado donde se guardaba la lejía, en el techo que diera directamente sobre la cafetera y en el pasillo hacia la lavandería.
Finalmente, después de unos días, logró capturar a la mujer en video agarrando la lejía, vertiéndola en un recipiente y colocando el liquido en le cafetera.
Con todas las pruebas en sus manos, los oficiales obtuvieron una orden para revisar la casa. En el lugar encontraron que las tazas de café olían a lejía. Asimismo, en la habitación de Melody encontraron otro recipiente con rastros de la sustancia.
La mujer quedó privada de libertad y le fijaron una fianza de $250,000, la cual no ha pagado, hasta este domingo. Los fiscales dijeron al juez que era necesaria una fianza elevada porque la sospechosa compró recientemente una casa en Filipinas, cerca de su familia, y considera que existe riesgo de fuga.
Durante su primera audiencia con un juez se declaró inocente y pidió un abogado. La acusaron por los siguientes cargos: Intento de asesinato en primer grado, violencia doméstica, intento de cometer agresión agravada y agregar veneno o sustancia dañina a la comida o bebida. El próximo 6 de septiembre acudirá a la Corte por segunda vez, dónde posiblemente conozca su sentencia.
Roby sospecha que su exesposa estaba intentando envenenarlo para cobrar las prestaciones por fallecimiento.