México.- El devastador fenómeno climático conocido como El Niño ha dado inicio, según el comunicado emitido hoy por la prestigiosa Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA, por sus siglas en inglés). Este fenómeno, caracterizado por el calentamiento de la superficie del océano Pacífico oriental ecuatorial, ocurre en promedio cada 2 a 7 años y tiene graves implicaciones a nivel mundial.
Expertos advierten que El Niño puede desencadenar una serie de impactos devastadores, como el incremento del riesgo de lluvias torrenciales y sequías en diversas regiones del mundo. La climatóloga Michelle L’Heureux de la NOAA, afirma que El Niño también podría dar lugar a temperaturas récord, exacerbando aún más los efectos del cambio climático.
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) ya había pronosticado anteriormente que el período comprendido entre 2023 y 2027 sería el más caluroso jamás registrado en la historia de nuestro planeta. Esta alarmante predicción se basa en la combinación del fenómeno de El Niño y el calentamiento global causado por las emisiones de gases de efecto invernadero.
Por otro lado, La Niña, fenómeno climático contrario a El Niño que generalmente causa una disminución en las temperaturas, ha estado presente durante los últimos tres años. Sin embargo, esta vez es El Niño quien toma el protagonismo y amenaza con desencadenar estragos climáticos a nivel mundial.
Aunque El Niño suele moderar la actividad de huracanes en el Atlántico, favorece la formación y el fortalecimiento de estos en el Pacífico, según los expertos de la NOAA. Por esta razón, Australia ha advertido recientemente que este fenómeno aumentará aún más las temperaturas en un país que ya se encuentra vulnerable a los incendios forestales.
En cuanto a Estados Unidos, la influencia de El Niño es más débil durante el verano, pero se vuelve más pronunciada desde finales del otoño hasta la primavera, como señala la NOAA en su comunicado. A pesar de esto, no se puede subestimar la capacidad de este fenómeno para generar situaciones climáticas extremas y perturbadoras en el territorio estadounidense.
Ante la llegada de este fenómeno desestabilizador, es fundamental que los gobiernos y las comunidades estén preparados y tomen medidas de precaución para minimizar los posibles daños.
Con información de MSN
