Ciudad Juárez, Chih.- Daniel Goray Yosioka, empleado del Instituto Nacional de Migración (INM), es uno de los servidores públicos federales que se encuentra detenido en la delegación estatal de la Fiscalía General de la República (FGR) tras el siniestro del pasado lunes en las instalaciones del centro de migrantes en Ciudad Juárez, Chihuahua, donde perdieron la vida 39 migrantes y otros más lesionados.
La esposa de Goray Yosioka, Fernanda Chacón Téllez, señaló que las autoridades lo acusan por el incidente en el centro de retención de migrantes.
Expuso que su marido sí trabaja en el organismo, pero no estaba en horario laboral, no se encontraba en las instalaciones cuando ocurrió el incendio y no es el responsable de ese lugar.
Indicó que “estaba conmigo, en casa. no tiene responsabilidad alguna ni por omisión ni por decisión”.
Ante esta situación, agentes del INM se manifestaron la tarde de este jueves en las instalaciones del organismo en el Puente Internacional libre, debido a la detención de tres de sus compañeros.
Jesús Ignacio Molina Leyva, uno de los elementos, manifestó que sus compañeros en ningún momento actuaron con dolo y que todos ahí realizan su trabajo bajo reglamento, además dijo que cuando la nube de humo los alcanzó ellos también buscaron salvar su vida.
Cabe destacar que la tarde de ayer miércoles, tras darse a conocer el falso rumor de que Estados Unidos les abriría las puertas a los migrantes, decenas de ellos se abalanzaron al bordo del Río Bravo.
De forma inmediata, los agentes de la Guardia Nacional de EU y patrulla fronteriza iniciaron con el protocolo para repeler cualquier intento de ingreso en masa.
El agente jefe de patrulla del sector de el paso de Aduanas y Protección Fronteriza, Anthony “Scott” Good, comunicó por medio de Twitter, que más de mil 200 migrantes, en su mayoría de Venezuela, se entregaron a los elementos de la Patrulla Fronteriza en El Paso, Texas, luego de ingresar ilegalmente al país, los cuales fueron detenidos y comenzaron a ser procesados en las instalaciones, lo que provocó que hoy otros extranjeros creyeran que ya habían sido recibidos por Estados Unidos, por lo que hoy 200 migrantes más se entregaron a la Patrulla Fronteriza.