Chihuahua, Chih.- Las corporaciones de seguridad, según los sociólogos, suelen ser laceradas y señaladas en cuanto a vulnerabilidad de los derechos humanos, pues en algunas ocasiones los elementos se convierten en víctimas de acusaciones falsas de quienes son detenidos al haber cometido una falta o delito.
Para un gran porcentaje de la sociedad en cualquier parte del mundo, las fuerzas del orden suelen ser inquisidoras cuando realizan una detención o se utiliza la fuerza para ello, sobre todo cuando existe resistencia por parte las y los responsables de un hecho delictivo.
En los últimos años, la Policía Municipal de Chihuahua ha sido considerada una de las mejores en México, no sólo por la tecnología que ha implementado para prevenir, coadyuvar y perseguir delitos a través de la Plataforma Escudo Chihuahua Capital (PECUU), sino por el nivel de profesionalización que los últimos gobiernos locales han promovido entre los agentes del orden: capacitaciones, certificaciones internacionales o la implementación de dos carreras profesionales para policías y bomberos.
Por otra parte, la creación de una Policía de Proximidad cercana a la comunidad, de un grupo DARE que busca combatir las adicciones y la violencia en las escuelas, una Policía Escolar que ofrece pláticas preventivas y un nuevo Modelo de Justicia Cívica, son sellos que actualmente caracterizan a la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), cuyos resultados han llamado la atención de otras corporaciones tanto del estado como del país, con el objetivo de replicar estas buenas prácticas en sus respectivos lugares.
El director de la Policía Municipal, Julio César Salas González, quien por muchos años se ha movido dentro de las filas de la seguridad pública, conoce sobre las fortalezas y debilidades de la dependencia que tiene a su cargo y, quien expresa aún hay mucho trabajo por hacer, también reconoce los logros de sus compañeros, entre ellos la disminución de casi un 50 por ciento de quejas ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), en comparación al 2019.
La tendencia desde el 2019 hasta hoy ha ido a la baja en este rubro y la meta es lograr que no exista ninguna réplica, ninguna reclamación o inconformidad por parte de ciudadanos que acuden a la CEDH para expresar maltratos o abusos, algo que en un corto o mediano plazo se puede lograr si cada elemento realiza sus labores de manera correcta y apegadas a la legalidad.
Este importante logro ocurre por varios factores internos y externos a la corporación policial, que han sido esenciales para impulsar y concientizar a los elementos sobre la importancia de servir y proteger a su comunidad.
Líderes como el alcalde Marco Bonilla y el propio director de la DSPM, han sabido guiar y promover entre sus colaboradores la cultura de la legalidad y un marcado sentido de pertenencia a la familia de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, que, con ello, han logrado brindar buenos resultados.