Estados Unidos.- La primaria Robb Elementary en Uvalde, Texas, donde ocurrió una masacre el pasado 24 de mayo, será demolida, anunció el alcalde, Don McLaughlin.
«Nunca podrías pedirle a un niño que regrese o a un maestro que regrese a esa escuela. Nunca», dijo el edil, tras el tiroteo que dejó sin vida a 21 personas.
El alcalde también criticó duramente al Departamento de Seguridad Pública del estado de Texas (DPS) y a su líder, el coronel Steven McCraw.
Los Texas Rangers, una agencia del DPS, están liderando la investigación del tiroteo y McLaughlin dijo que estaba molesto porque él y otros funcionarios de la ciudad nunca habían sido informados sobre cómo iba la investigación, señala la cadena CNN.
Las críticas hacia la actuación policial durante la masacre en la escuela primaria no han dejado de aumentar desde que se produjo el suceso y el Gobierno de Estados Unidos ha anunciado que llevará a cabo una investigación sobre el asunto.
Ayer, Steven McCraw, director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, informó que el día del tiroteo en Texas, el comandante de la Policía de Uvalde antepuso la vida de los agentes antes que la de los niños.
«Lo único que impidió que un pasillo de oficiales dedicados ingresara a los salones 111 y 112 fue el comandante en la escena, quien antepuso la vida de los oficiales a la vida de los niños», señaló.
Agregó que el autor del tiroteo de Uvalde (Texas) pudo haber sido confrontado por la policía en los primeros minutos de entrar en la escuela primaria.
«Tres minutos hubieran hecho la diferencia», aseguró ante una audiencia en el Senado de Texas.
El coronel dejó claro que había suficiente personal armado y protección, que se perdió tiempo y que incluso nadie intentó abrir una puerta, que además estaba descompuesta.
EFE