Chihuahua, Chih. El juez Uriel Samuel Mendoza Rodríguez reconoció que durante el caso que se inició en contra de la gobernadora María Eugenia Campos Galván, recibió presiones para determinar el sentido de la resolución, particularmente desde el gobierno de Javier Corral Jurado, a través de la Secretaría General de Gobierno.
En entrevista para un periódico impreso, dijo que durante el tiempo que duró la vinculación a proceso de la entonces candidata del pan a la gubernatura, tanto él como otros juzgadores fueron momentos de muchas presiones por parte del Gobierno del Estado e inclusive de partidos políticos que buscaron influir en el proceso penal.
Samuel Uriel Mendoza fue designado como juez de lo penal en el proceso de selección del 2018, mismo que realizó la ex consejera de la Judicatura, Luz Estela “Lucha” Castro y su ratificación se dio en 2020.
El 1 de abril del año pasado, dictó el auto de vinculación a proceso en contra de la actual gobernador por el presunto delito de cohecho, luego de que la Fiscalía pretendió relacionarla con la nómina secreta de César Duarte; en sus argumentos, consideró como buenos los presuntos recibos firmados por la gobernadora durante 2014 y 2015 por 8.2 millones de pesos.
Posteriormente, el 7 de septiembre el magistrado de la tercera sala de lo penal, Juan Carlos Carrasco Borunda retiró los cargos por los cuales Maru Campos estuvo vinculada a proceso.
