Parral, Chih.- En Hidalgo del Parral, Chihuahua, los carriles de carreras de caballos se han convertido en un escenario habitual de violencia por enfrentamientos entre cárteles rivales. El saldo combinado de ambos ataques supera las 11 víctimas.
El primer episodio ocurrió en mayo de 2024, cuando una emboscada en la vía corta, relacionada con el centro hípico Maturana, dejó cuatro personas muertas. Entre los fallecidos se encontraban Marisela Barrón, propietaria del hipódromo; su pareja, el músico Kevin Amalio Hernández; y dos de sus hijos menores, de 17 y 14 años.
El segundo ataque, ocurrido este sábado en el carril Santa Teresa durante una carrera de caballos, dejó siete muertos, incluyendo a líderes criminales como Benito “El 8-4” Molina, señalado por su presunta participación en la masacre de Maturana.


