Chihuahua, Chih.- Las líneas horizontales que se ven en el cristal trasero de los coches son en realidad resistencias calefactoras, también conocidas como desempañador trasero o luneta térmica.
Su función principal es eliminar el empañamiento y la condensación del vidrio, mejorando la visibilidad al conducir, especialmente en condiciones de frío o humedad.
¿Cómo funcionan?
Están compuestas por finos hilos conductores, generalmente de metal o resina, integrados en el vidrio.
Al activar el desempañador trasero, una corriente eléctrica pasa por estos hilos, generando calor y eliminando rápidamente la niebla, el vaho o la escarcha que se acumulan en el cristal.
Esto es especialmente útil para maniobras como dar marcha atrás o cambiar de carril.
Importancia para la seguridad:
La visibilidad es clave para una conducción segura, y el desempañador trasero ayuda a mantener una visión clara del tráfico detrás del vehículo, lo que reduce el riesgo de accidentes.
Es importante revisar periódicamente que estas líneas estén en buen estado y funcionando correctamente, ya que su efectividad impacta directamente en la seguridad del conductor y los pasajeros.