Meoqui, Chih.- En Meoqui, la escultura de un pelícano diseñada por Miguel, un artista originario de Cuauhtémoc, ha captado la atención de los habitantes que transitan por la avenida Aldama, en el acceso norte de la ciudad.
La pieza, elaborada en acero, representa a un pelícano en el momento de acuatizar, tal como sucede cuando estas aves llegan al río San Pedro, en el vado de Meoqui, un fenómeno natural muy apreciado por la comunidad.
Con un peso aproximado de mil kilogramos, la estatua destaca por sus imponentes dimensiones: 1.90 metros de altura, una envergadura de 3.90 metros de largo y un ancho de 1.20 metros. Su creación requirió más de seis meses de trabajo minucioso.
Miguel, conocido por su dedicación a la escultura y la pintura mural, explicó que fue el municipio quien lo contactó para materializar esta obra que ahora adorna el paisaje urbano de Meoqui.
