Ciudad Juárez, Chih.- El primer caso de aborto voluntario y legal en Chihuahua ya se efectuó en junio, luego de que en mayo pasado un Tribunal Colegiado del Poder Judicial de la Federación (PJF) ordenó a la Secretaría de Salud difundir información e implementar servicios de aborto voluntario a las mujeres hasta las 12.6 semanas de gestación.
El caso fue en la ciudad de Chihuahua, donde una joven de quien no se especificó la edad, junto al acompañamiento de colectivos, logró que las instituciones de salud estatales le dieran los insumos y medicamentos necesarios para abortar de forma segura, además de recibir una consulta de revisión posterior.
Lo anterior se logró gracias a la lucha de grupos como Marea Verde Chihuahua, que ahora continúan con el trabajo para que las chihuahuenses estén enteradas de que pueden interrumpir su
Alessa Rey, integrante de Marea Verde Chihuahua, relató a que, tras la sentencia del tribunal colegiado, las organizaciones: Red de Aborto Seguro Chihuahua, CHEROS, Morrxs Autonomxs y AbortistasMx, así como Marea Verde Chihuahua, comenzaron a capacitarse más, ya que la lucha no concluía con los tres amparos que implementaron e iniciaron desde 2021, sino que ahora tenían que acompañar a las mujeres.
“Una vez que supimos lo de la sentencia sabíamos que venía otro trabajo más grande, tenía que ver con acompañar a las mujeres en los hospitales, teníamos que estar más capacitadas, informarnos más y buscar qué mecanismos íbamos a utilizar para exigir la implementación de estos servicios”, detalló la activista.
Estas capacitaciones se hicieron con mujeres de los municipios de Ciudad Juárez, Chihuahua, Cuauhtémoc, Delicias, Jiménez y Parral, ya que tienen mayor población.
El primer caso tras la sentencia
La sentencia del Tribunal Colegiado del Poder Judicial de la Federación (PJF) se hizo pública a finales de mayo y fue en las primeras semanas de junio que se logró que una mujer pudiera abortar de manera legal en Chihuahua.
“Estamos muy contentas porque ya logramos que se atendiera al primer caso de una mujer que decidió ir a un hospital, a exigir este servicio. Nosotras la acompañamos, no teníamos certeza de cómo sería el trato. Nosotras tenemos un protocolo de acompañamiento [para los hospitales] además de los acompañamientos que tenemos para que mujeres puedan abortar en sus casas”, comento Rey.
Para lograr que se ejecutara la orden del Tribunal Colegiado, las integrantes de Marea Verde explicaron que primero presentaron una solicitud a la Secretaría de Salud estatal, en la cual les dijeron que no se podía.
“Nos respondieron que no se podía porque la chica que había solicitado el aborto no era parte de los amparos, pero en este caso sabemos que la sentencia del Tribunal Colegiado es con efectos generales, es decir, para todas las personas que lo soliciten. Nos dijeron que no, le avisamos al juez, abrimos un proceso de incumplimiento de sentencia y el juez les ordenó que le realizaran el proceso. Este sería el primer caso, además les ordenaron como un informe de que están haciendo a la Secretaría de Salud Estatal”, explicó la integrante de Marea Verde.
De acuerdo con el colectivo, aunque existe la sentencia, ahora a las organizaciones les preocupa que no se difunda el servicio.
“Nos preocupa que no se está haciendo más público, y también algo que detectamos en informes que le envían al juez, es que dicen que tiene personal dedicado para esto en los hospitales de segundo nivel, pero nos preocupa que nos dijeran en qué hospitales y en qué municipios se llevaría a cabo”, expresó la activista.
A la fecha, los colectivos y mujeres que de manera libre deciden interrumpir el embarazo no tiene claro a qué hospitales ir, si el personal está capacitado y qué tipo de atención recibirán.
“Sabemos que son cosas que se van a ir puliendo [por la Secretaría de Salud], pero nosotros como colectivos vamos a ir exigiendo estos cambios para que de alguna forma pueda haber un servicio como debe de ser y con ello evitar la violencia obstétrica”, señala.
A la fecha, las mujeres en Chihuahua tienen las dos opciones, la de llevar un acompañamiento a través de colectivos para la interrupción del embarazo de forma voluntaria en casa o acudir a las instituciones y solicitar la atención médica.