Estados Unidos.- Tesla demandó a Matthews International, un antiguo proveedor y lo acusa de robar secretos comerciales relacionados con la producción de baterías, informa Electrek. Según Tesla, Matthews International utilizó indebidamente tecnología de fabricación de baterías de electrodo seco y la compartió con otros clientes, incluidos competidores directos.
Tesla presentó la demanda en un tribunal de California y argumenta que seleccionó a Matthews en 2019 para ser uno de sus proveedores de equipos necesarios para refinar y producir en masa tecnología de baterías de electrodo seco. La compañía de Elon Musk afirma que Matthews aceptó un acuerdo de confidencialidad y se comprometió a no compartir la tecnología con terceros.
En la demanda, Tesla acusa a Matthews de dos formas principales de infracción. Primero, la compañía afirma que Matthews incorporó indebidamente sus secretos comerciales en las solicitudes de patente, por lo que reclama la propiedad intelectual del fabricante de vehículos eléctricos con sede en Austin, Texas.
Esta acción, según Tesla, ha llevado a la publicación de cierta información confidencial sobre procesos de fabricación de electrodos secos. Tesla afirma que Matthews nunca buscó permiso para presentar estas solicitudes y que descubrió las aplicaciones por sí sola. Como resultado, Tesla ha intentado bloquear o retrasar la publicación de las solicitudes afectadas, aunque parte de la información ya ha sido publicada.
En segundo lugar, Tesla acusa a Matthews de revelar sus secretos comerciales a otras empresas, incluidos competidores. La compañía sostiene que Matthews intentó vender y, en algunos casos, vendió equipos para la fabricación de baterías de electrodo seco que incorporaban secretos comerciales de Tesla. Según la empresa de Elon Musk, esta conducta ha resultado en la transmisión no autorizada de tecnología confidencial a competidores, lo que causó daños directos y graves a la empresa.
Los reclamos de Tesla
Tesla reclama daños y perjuicios en la demanda por mil millones de dólares. La compañía argumenta que la conducta de Matthews ha negado a Tesla los derechos de patente sobre su propia tecnología y ha compartido información valiosa con el público y competidores, lo que afectó negativamente su negocio.
Matthews International niega las acusaciones de Tesla. La empresa afirma que los argumentos carecen de fundamento y que defenderá enérgicamente el asunto. Matthews señala que la demanda no identifica específicamente ningún secreto comercial que Tesla supuestamente reveló a Matthews. Además, la compañía alega que Tesla intenta apropiarse indebidamente de tecnología de electrodos secos y que la demanda es una táctica para intimidar a Matthews y evitar que ofrezca soluciones innovadoras a otros.
Según Matthews, la queja de Tesla busca impedir que el mercado se beneficie de los ahorros asociados con sus soluciones de electrodos de batería seca, lo que interfiere con la capacidad para realizar el valor de su propiedad intelectual. La empresa enfatiza que Tesla compró Maxwell Technologies en 2019 con el objetivo principal de adquirir tecnología de electrodo seco e integrarla en su nueva tecnología de celdas de batería 4680.
El resultado de este litigio dependerá de la capacidad de Tesla para demostrar que Matthews utilizó y divulgó indebidamente secretos comerciales. La resolución del caso podría tener implicaciones significativas para la protección de propiedad intelectual en la industria de vehículos eléctricos y establecer precedentes importantes sobre cómo se gestionan las disputas de tecnología en este sector competitivo. La atención está puesta en los tribunales, donde se determinará si hubo una violación de confidencialidad y qué medidas se tomarán para resolver este conflicto.