Estados Unidos.- Cuatro letras escritas con hojas de palmera sobre la playa han sido cruciales para el rescate de tres marinos que naufragaron en un pequeño atolón deshabitado del Pacífico. “HELP” (ayuda o socorro en inglés) fue el mensaje que los equipos de rescate que sobrevolaban la zona pudieron leer desde el avión. Tras más de una semana perdidos, los tres están a salvo, según ha informado la Guarda Costera de Estados Unidos.
Los tres marineros, todos ellos hombres de unos 40 años, se embarcaron el domingo 31 de marzo en el atolón de Polowat (Micronesia) en una pequeña lancha de unos seis metros equipada con un motor fueraborda. Tenían experiencia en la navegación por aguas de esa región del Pacífico.
Sin embargo, sufrieron un problema en la embarcación y se quedaron varados. El 6 de abril, el Subcentro Conjunto de Rescate (JRSC) de Guam recibió una llamada de socorro de una familiar de los tres marinos que informaba de que sus tres tíos no habían regresado del atolón de Pikelot (Estado de Yap, Estados Federados de Micronesia), a unas 100 millas náuticas al noroeste del atolón de Polowat.
Los vigilantes del JRSC de Guam empezaron inmediatamente a coordinar una operación de búsqueda y rescate. Hubo dificultades iniciales para movilizar los medios aéreos debido a la falta de disponibilidad, los compromisos operativos y las condiciones meteorológicas. Al final, los esfuerzos condujeron a la movilización de una tripulación de aviones P-8 de la Marina de Estados Unidos de la Base de la Fuerza Aérea de Kadena en Japón y al desvío del barco de los guardacostas Oliver Henry a la zona de búsqueda inicial, que abarcaba más de 78.000 millas náuticas cuadradas.
El gran avance se produjo cuando el avión P-8 Poseidon de la Marina estadounidense identificó a los tres marinos el 7 de abril en el atolón de Pikelot, confirmando su presencia y su estado. “En un notable testimonio de su voluntad de ser encontrados, los marinos escribieron ‘HELP’ en la playa utilizando hojas de palmera, un factor crucial para su descubrimiento. Este acto de ingenio fue fundamental para guiar los esfuerzos de rescate directamente a su ubicación”, dijo a través de un comunicado de la Guardia Costera la teniente Chelsea Garcia, coordinadora de la misión de búsqueda y rescate el día en que fueron localizados.
La tripulación de la aeronave desplegó con éxito paquetes de supervivencia para mantener a los marineros hasta que pudiera llegar más ayuda. El Oliver Henry fue dirigido al atolón de Pikelot para llevar a cabo la operación de rescate. La tripulación del barco guardacostas se encontró con los marinos en el atolón en la mañana del 9 de abril. Conforme a lo solicitado, el buque rescató con éxito a los náufragos y los devolvió al atolón de Polowat junto con su fueraborda.
Curiosamente, es el segundo rescate que se produce en circunstancias similares en pocos años en Pikelot. En agosto de 2020, un mensaje SOS escrito sobre la playa de esa misma microisla del Pacífico fue clave para que las autoridades pudiesen rescatar a tres marineros que habían naufragado en el trayecto entre los atolones de Pulawat y Pulap. Pasaron tres noches y dos días a la intemperie, pero el dibujo en la arena fue suficiente para que la guarda costera los localizara y rescatara en perfecto estado.
En abril de 2016, tres hombres fueron rescatados de la pequeña y deshabitada isla de Fanadik, también en la Micronesia, después de que su barco se hundiese a casi cuatro kilómetros de la costa. Estos náufragos escribieron un gigantesco “HELP” con hojas de palmeras y fueron rescatados por la Marina de Estados Unidos tres días después
En agosto de ese mismo año, una pareja fue rescatada de la isla desierta de East Fayu, igualmente en la Micronesia, después de que una aeronave de la Marina de Estados Unidos que sobrevoló el atolón leyera la señal de SOS que había escrito en la arena.
Con información de El País