Madrid, España.- Después de varios años de investigación y proceso, y de más de tres semanas de negociación de última hora, finalmente la cantante colombiana Shakira decidió pactar con el juez español que la investigaba por fraude fiscal y evitar así un juicio penal que de no haber llegado a este acuerdo habría iniciado hoy mismo.
La artista latinoamericana finalmente aceptó que incurrió en un fraude fiscal de algo más de 14 millones 500 euros (que ya pagó hace unos meses), con lo que se le condenó a una pena de prisión de tres años y a una multa de siete millones 300 mil euros. Gracias a este acuerdo, Shakira no entrará en prisión y ya es libre de volver a Miami, la ciudad donde reside con sus hijos desde su separación del futbolista catalán Gerard Piqué.
Shakira fue acusada de fraude fiscal por unos hechos que se remontan a los años 2012, 2013 y 2014, precisamente cuando inició su relación sentimental con el futbolista y que provocó su traslado a vivir a Barcelona. A pesar de que la mayor parte del año residía en Barcelona, la cantante no pagó los impuestos de esos tres ejercicios fiscales, alegando que por sus actividades profesionales viajaba la mayor parte del año. Pero la investigación demostró que pasaba más de seis meses al año en Barcelona, lo que establece la ley para obligar a fijar su residencia fiscal en España.
Todas las pruebas recabadas por Agencia Tributaria española y los agentes especializados en este tipo de delitos estaban en contra de la cantante, quien, pese a todo, se empeñó en forzar el juicio penal.
Pero, cuando ya estaba a punto de dar inicia, finalmente decidió pactar con la Fiscalía, la Abogacía del Estado y el gobierno autonómico de la Generalitat de Cataluña, que eran los que formaban la parte acusadora. Y el pacto fue la admisión y reconocimiento de la sentencia del juez y una pena de cárcel de tres años y la multa millonaria. De no haber reconocido los hechos no hubiera tenido una reducción de condena y de multa, que posiblemente hubieran alcanzado los ocho años de cárcel y una multa de 23 millones 500 mil euros.
Este pacto suma también la sustitución de los años de cárcel por una multa más de 432 mil euros, que evitó que entrara en prisión, ya que la legislación española establece que en las condenas de más de dos años de cárcel es obligatorio la entrada en prisión, si bien hay algunas excepciones, como las que beneficiaron a la cantante.
Shakira hizo público un breve comunicado en el que señaló: “Tengo que escoger mis batallas y la más importante ahora es hacer todo para que mis hijos vivan una vida plena y enfocarme en lo que es realmente importante: verlos crecer y pasar tiempo con ellos, sin someterlos a la angustia de ver a su madre en un juicio penal con el desgaste que supone”.