Estados Unidos.– Dos adolescentes estadounidenses, animadoras, resultaron heridas por arma de fuego después de que un hombre les disparara tras haber intentado abrir el vehículo equivocado en un aparcamiento.
La Policía de la ciudad de Elgin, en el estado de Texas, informó en un comunicado del arresto de un hombre de 25 años, Pedro Tello Rodríguez, acusado de haber abierto fuego indiscriminadamente contra un grupo de jóvenes después de que una de ellas intentara entrar en su vehículo, por error, pensando que era el suyo.
Dos jóvenes animadoras fueron alcanzadas por los disparos y una de ellas fue herida de gravedad en este suceso que se produjo la noche del lunes.
Una de las jóvenes contó lo sucedido en una vigilia celebrada en el gimnasio de su equipo de animadoras, que fue retransmitida por redes sociales y de la que se hizo eco ABC News.
Según explicó, la joven llegó al estacionamiento a bordo del automóvil de un amigo y fue a cambiarse a su propio vehículo. Abrió la puerta del que pensaba que era su automóvil y se encontró a un hombre sentado en el asiento del pasajero.
Al darse cuenta del error le pidió disculpas y regresó al vehículo de su amigo, en el que viajaban cuatro personas (con ella incluida) pero el dueño del vehículo al que intentó subirse se bajó y atacó a los jóvenes.
«Vi al tipo salir por la puerta del pasajero, bajé la ventanilla y estaba tratando de disculparme con él», pero él «levantó las manos, sacó un arma y comenzó a dispararnos a todos», explicó la joven, Heather Roth.
Tello fue detenido horas después gracias a las grabaciones de las cámaras de video vigilancia y llevaba todavía la misma ropa que usaba durante el incidente.
Este es el tercer caso de personas heridas o asesinadas por error en los últimos días. Ralph Yarl, de 16 años, se equivocó de casa la noche del jueves pasado en Kansas City (Misuri) cuando fue a buscar a sus dos hermanos menores, y el dueño de la vivienda, un hombre de 84 años, le disparó hiréndolo en un brazo y encima del ojo izquierdo.
El sábado pasado, una joven, Kaylin Gillis, murió después de que su vehículo entrara accidentalmente en el camino de entrada a la casa de un hombre, quien abrió fuego contra el automóvil, dos sucesos que han conmocionado a parte de la sociedad estadounidense que pide un mayor control de las armas.