Chihuahua, Chih.- En muchos países, el Domingo de Resurrección se celebra regalando huevos de Pascua, decorados con pintura, confeti e incluso rellenos de chocolate.
Incluso en países como Estados Unidos, las familias organizan una búsqueda de los huevos de Pascua, los cuales son “escondidos” por el Conejo de Pascua, una figura similar a Santa Claus y el Ratón de los Dientes.
El origen de está tradición es muy variado, se remonta a una celebración pagana, en el que se celebraba a la diosa Ostara y la llegada de la primavera, enterrando los huevos para simbolizar el renacer de la naturaleza.
Pero en los primeros años de la iglesia católica, fue adoptado como un símbolo de la resurrección de Cristo y se decoraban de color rojor para simular la sangre derramada por el redentor.
Aunque otra versión sugiere que eran pintados de rojo para identificar la antigüedad de los huevos, pues durante la Edad Media, el huevo no se podía consumir durante toda la cuaresma y era precisamente el Domingo de Resurrección, cuando se levantaba la norma, que los creyentes hacían un gran festín con los huevos.
Cabe destacar que, eran decorados con una fina capa de cera, debido a la falta de otros recursos, pero también porque ayudaba a conservar el alimento.
Posteriormente, la norma que prohibía su consumo se retiró y la tradición ha evolucionado hasta crear nuevas actividades que pueden disfrutar los más pequeños, pero sigue siendo un momento de alegría y reunión.