León, Guan.- Un terrible caso de violencia familiar terminó en un atroz asesinato y descuartizamiento de una mujer a manos de su expareja, quien le quitó la vida cuando ella fue a buscarlo para pedirle que cuidara al bebé de ambos.
El trágico incidente se registró en la colonia Torre Dorada, de León, Guanajuato, y la víctima de manos asesinas fue Ángela Yosselín, de 24 años de edad.
De acuerdo con la información, el 28 de febrero, “Jaqui”, como cariñosamente llamaban a la fémina, acudió a casa de su ex, Raymundo, para que se hiciera cargo del hijo mutuo de 7 meses de edad mientras ella iba a trabajar; desde entonces su familia le perdió la pista.
Sin embargo, ella nunca salió del domicilio del hombre, pues éste le arrebató la vida cruelmente al decapitarla y luego desmembró su cadáver.
Como no llegó a su trabajo, fueron sus compañeros de labores quienes reportaron a la familia de la joven que no había acudido a su centro de trabajo, por lo que ese mismo día se inició una intensa búsqueda y se interpuso la denuncia de desaparición; los familiares de “Jaqui” explicaron que había acudido a la casa de su expareja, de quien se había separado por violento.
Elementos de la Policía acudieron al domicilio de Raymundo, quien les aseguró que la mujer sólo le dejó al menor y se fue, y que no supo más de ella.
Como fue el último que la vio con vida, el sujeto se convirtió en el único sospechoso, por lo que se solicitó una orden de cateo, la cual se ejecutó en el domicilio de Torre Dorada: ahí hallaron el cuerpo de Ángela Yosselín, descuartizado y en costales sangrientos.
Además, las pertenencias de la víctima también fueron encontradas en el domicilio, por lo que de inmediato se puso a Raymundo bajo arresto, quien fue vinculado a proceso y remitido en prisión preventiva.
