Chihuahua, Chih.- José Noriel Portillo Gil, alias “El Chueco” fue localizado sin vida en un camino de terracería del municipio de Choix, Sinaloa, entre el poblado de Buyubampo y “los Picachos», donde también se localiza el entronque del poblado “La Viuda”.
La zona donde localizaron muerto a “El Chueco” se encuentra a 7 horas con 40 minutos del poblado de Cerocahui, municipio de Urique, lugar donde cometió la masacre. Son 225 kilómetros los que dividen a estos dos puntos.
De acuerdo a la Fiscalía General del Estado, José Noriel constantemente se desplazaba entre Chihuahua, Sonora y Sinaloa, que son las propiedades más cercanas que se encuentran de su punto de operación en Urique, donde permanecía resguardado.
Primeros informes indican que el responsable del asesinato de los sacerdotes jesuitas murió el pasado sabado 18 de marzo en un enfrentamiento armado entre grupos del Cártel de Sinaloa.
En redes sociales circuló una imagen del rostro de “El Chueco” al momento de su hallazgo, en la fotografía se pueden apreciar los impactos de arma de fuego en la cabeza, mismos que le causaron la muerte.
Personal de la Agencia Estatal de Investigación fue enviado la mañana de este miércoles a la ciudad de Los Mochis en el estado vecino para obtener mayor evidencia de los hechos.
En la escena se localizaron 16 cartuchos percutidos, sin embargo, “El Chueco” tenía un balazo en la cabeza, conocido como “el tiro de gracia”.
El fiscal César Jáuregui, resaltó que lo tenían ubicado, pero las condiciones climáticas y propias de la sierra dificultaron una detención inmediata, sin embargo, este operativo a partir de los hechos de Cerocahui le restaron capacidad operativa.
Desde hace más de cinco años, “El Chueco” era buscado por las autoridades estatales. Se le atribuye el asesinato del turista norteamericano, Patrick Braxton, cometido en el año 2018 en el municipio de Urique.
Además, fue el autor intelectual y material del crimen de Cerocahui, el 20 de junio del 2022, en el cual privó de la vida a los sacerdotes jesuitas, Joaquín Mora y Javier Campos, al guía de turistas Pedro Palma y al habitante de la comunidad Paul Osvaldo Berrelleza.
