Chihuahua, Chih.- Margarita Rojas, ex trabajadora del asilo “Villa Santana”, localizado en la colonia Granjas, solicita que el DIF estatal haga una intervención del hogar para adultos mayores, pues fue testigo del maltrato contra decenas de abuelitos. Denuncia que se le da comida en mal estado, por ejemplo, atole de maseca con polilla.
También explicó que no les cambian los pañales a los ancianos y pasan largo rato incómodos. Mientras que, cuando los bañan, si es que los bañan, los hacen levantarse en la madrugada, exponiendolos al frío y a la falta de descanso.
En Chihuahua hay una ley para el funcionamiento de asilos, la cual resalta que deben ser vigilados por la Secretaría de Salud, Coespris, DIF estatal, así como Protección Civil.
Los lugares de cuidado, deben contar con una licencia de funcionamiento, así como póliza de seguro, ante eventualidades que pongan en riesgo a los adultos mayores.
Todos los asilos deben tener un programa nutricional autorizado y para las admisiones es obligatoria una valoración médica.
Los dueños y residentes por obligación deben tener un contrato firmado, donde se especifiquen los cuidados que debe recibir cada abuelito. Y cuando hay suministro de medicamentos, los familiares deben estar informados en todo momento.
En caso de violar la ley, los asilos pueden ser sancionados con una multa que va de 50 a 500 umas, así como la suspensión o revocación de su licencia. En teoría, las revisiones aleatorias deben hacerse mínimo una vez cada tres meses.