La especialista en Nutrición Clínica de la Facultad de Enfermería y Nutriología de la UACH, Dra. Erika Sáenz Pardo Reyes, realizó una investigación en la que afirma que comer de modo lento es un factor de protección frente a la ingesta excesiva de alimentos y de calorías.
Asimismo, se identificaron técnicas y estrategias de intervención nutricional-conductual, eficaces para disminuir la velocidad al comer y la ingesta de alimentos o calorías, que pueden ser útiles en el tratamiento o la prevención de enfermedades como el sobrepeso o la obesidad.
La doctora en Ciencia del Comportamiento en Alimentación y Nutrición explicó que la investigación que efectuaron consistió en una revisión sistemática de 15 estudios de seres humanos y un meta-análisis de 7 estudios con 11 manipulaciones experimentales y 1 observacional, realizados en participantes de cualquier sexo, edad, composición corporal, actividad física y país.
A continuación, se mencionan ocho técnicas y estrategias útiles para disminuir la velocidad al comer y la ingesta de alimentos o calorías:
1. Comer pequeños bocados con ayuda de una cuchara o tenedor de tamaño pequeño.
2. Realizar entre 20 a 30 masticaciones por bocado.
3. Dejar la cuchara o tenedor en la mesa entre bocados.
4. Preparar platillos de comida con diferentes mezclas de texturas, colores y sabores.
5. Consumir alimentos con texturas duras y evitar el consumo de alimentos de texturas suaves o preparados en forma de puré o picado fino.
6. Seleccionar alimentos ricos en fibra para la elaboración de los platillos de comida.
7. Servir la comida en utensilios pequeños y de preferencia un guisado por plato como en las mesas de comida asiática o realizar varios tiempos de comida, en vez de colocar toda la comida que se va comer en un solo plato.
8. Consumir bebidas y semisólidos con mayor viscosidad contra menor viscosidad.